La Seguridad Social
pretende utilizar la aplicación del nuevo sistema de liquidación de
cuotas sociales, por el que las sociedades recibirán una factura con el
cargo de las cotizaciones a pagar en lugar de proceder a su autoliquidación,
para evitar que las empresas hinchen el número de días de baja por enfermedad
de los trabajadores y así reducirse el pago de cotizaciones que se compensan.
Según señaló este
martes en un acto en el Colegio de Economistas el Secretario de Estado, Tomás
Burgos, la Tesorería diseña un nuevo protocolo para controlar las situaciones
de incapacidad temporal (IT) que absorben al año un gasto de casi 1.200
millones. De esta forma, se sigue las recomendaciones del Tribunal de
Cuentas que hace unos meses denunció que entre octubre de 2010 y diciembre de
2012 se habían producido 1,9 millones de bajas laborales (el 64% del total) sin
control por «la falta de comprobación». El coste estimado para el sistema
público fue al menos de 1.185 millones.
Es decir, a pesar de
que en 2010 el Gobierno dictó una Resolución para someter a control la
compensación de las cotizaciones que hacen las empresas por los pagos,
que en concepto de incapacidad temporal hacen a sus trabajadores como
colaboración obligatoria con la Seguridad Social, es ahora cuando el sistema
público prevé cruzar datos telemáticos con el INSS (Instituto Nacional de la
Seguridad Social) y las mutuas.
Según Burgos, la nueva
ley de mutuas permitirá que esté interrelacionada toda la información sobre
altas, bajas y procesos de incapacidad temporal. Esta situación se llama pago
delegado pues corresponde al INSS y las mutuas hacer frente a la baja a partir
de los 15 primeros días y no a las empresas, que corren con el coste de la IT a
su cargo hasta ese momento. Para evitar perjuicios a los trabajadores cuando
caen enfermos o se accidentan, son las empresas las que pagan la prestación de
IT correspondiente y luego la descuentan de sus cotizaciones.
El caso es que en las
pruebas piloto sobre el nuevo sistema de liquidación, realizadas desde julio de
2013 sobre 70.847 empresas con 1,8 millones de trabajadores afiliados
al sistema, se han detectado muchos errores, que en algunos casos son algo
más ya que, ante la ausencia de este tipo de controles, algunas de estas
sociedades hinchaban el número de días de baja de los trabajadores para
compensar un mayor número de cotizaciones. Otros errores habituales detectados
tienen que ver con las cotizaciones cargadas a los empleos a tiempo parcial,
con menos tiempo del realmente contratado, y, por ejemplo, con la aplicación en la
autoliquidación de las empresas de bases de cotizaciones incorrectas, más
bajas. Aunque se han ido subsanando en estas pruebas, las discrepancias
iniciales entre esa autoliquidación y la factura que la Seguridad Social
prepara superaron el 30%.
Todo esto significa que, cuando se
implante este nuevo sistema de liquidación directa de cotizaciones, el sistema
de pensiones aumentará su recaudación y a muchos trabajadores les saldrá
mayores bases cotizadas para calcular su prestación.
El proyecto de ley
será aprobado en diciembre. La Seguridad Social elaborará los reglamentos en
dos meses y las empresas tendrán tres meses para entrar en el nuevo
sistema. La implantación será en mayo, paulatina y por provincias.
FRANCISCO NUÑEZ Madrid
Actualizado: 15/10/2014